Es un local que en primera forma de su creación era un bar de tapas de día y luego transformarse en un pub musical, donde tomar una copa.
Pero estas transformaciones tan habituales por ejemplo en Navarra y País Vasco, aquí parece no encajar del todo, sobre todo por la poca capacidad mental a las cosas nuevas que hay en ciertos lugares.
Pero es un lugar agradable, con su pequeña terraza, donde poder tomarte tu cerveza con su correspondiente tapa, cosa poco habitual en Catalunya.
También puedes pedir, tapas tipo: Bravas, Morros, Carne en salsa, caracoles,...
Son muy recomendables los bocadillos con auténticos molletes de Antequera. Donde recomiendo el santboiano,
En el apartado alcohólico, encontramos bebidas no muy habituales, que nos recordaran viejos tiempos como los chupitos de absenta y Stroh.
A parte ahora como novedad, hay cócteles a 3.50 euros, mojitos, margaritas, sex on the beach,...
Igualmente el bar en sí, es económico, especial para los tiempos que corren.
Se encuentra en la calle Ramón Estruch, 2
Lo mejor: El trato familiar de los dueños del local
Lo peor: Su ubicación algo oculta para nuevos clientes
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